La Habana, Cuba.- Preservar y hacer sostenible la cooperación que Cuba ofrece, así como mejorar la ejecución de los proyectos que el país recibe, centra las metas del Decreto-Ley 16, publicado en la Gaceta Oficial.
En un único documento legal se definen la conceptualización de la cooperación internacional y sus principios, las fuentes externas, las modalidades, los instrumentos con los que se ejecuta y la facultad a los gobiernos para el control de las acciones en sus territorios.
Magalys Estrada Díaz, directora general de Colaboración Económica del Ministerio del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera (MINCEX), explicó que se requiere una regulación integradora para eliminar los vacíos legales y la dispersión jurídica existente hasta ahora.
El nuevo paquete normativo incluye resoluciones complementarias que precisan detalles sobre la cooperación que Cuba ofrece y recibe.
Flexibilizar y agilizar procesos
El Decreto-Ley 16 refuerza el papel rector que, a nombre del Estado, ejerce el MINCEX en las actividades de cooperación internacional y al mismo tiempo flexibiliza y agiliza procesos.
Sobre esto último, la directora de Colaboración Económica del organismo, Magalys Estrada Díaz, argumentó que se trabaja en una plataforma informática que, en poco más de 1 año, posibilitará una ventanilla única para la presentación de cualquier proyecto.
Puntualizó que las nuevas normativas del MINCEX sobre cooperación internacional jerarquizan la voluntad política en un rango superior jurídico y para su entendimiento habrá un curso emergente de capacitación.
Cuba concibe la cooperación como un medio fundamental para contribuir a los procesos de integración y al desarrollo de pueblos hermanos, a la vez que un valioso instrumento para buscar soluciones a problemas que compartimos.