La Habana, Cuba. – La representante residente del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo en Cuba, Maribel Gutiérrez, reconoció el esfuerzo del país para garantizar la salud del pueblo ante la Covid-19, pese a carencias económicas debido al bloqueo.

La funcionaria dijo que la Isla priorizó la salud y el bienestar por encima de los intereses económicos, lo que significó un enorme esfuerzo debido a las limitaciones financieras y de recursos acentuados con la crisis sanitaria global.

Gutiérrez aseguró que la Unión Europea, Italia, Suiza y Canadá son algunos de los principales contribuyentes con proyectos de desarrollo sostenible que se impulsan en Cuba, como el programa de recuperación de viviendas afectadas por eventos naturales.

La representante detalló el proyecto de restauración de más de 600 kilómetros del litoral sur (Mi Costa), que beneficiará a 1, 3 millones de habitantes.