La Habana, Cuba. – Hoy les comento la última entrega de ediciones Polymita “Las Parrandas de Remedios. 200 años de historia y tradiciones” publicada en el año 2021. Los textos del libro son de Erick González Bello y Juan Carlos Hernández Rodríguez y las fotografías de Julio Ángel Larramendi Joa. Quiero significar que es un libro Bello, de los que solo por hojearlos da gozo.

A inicios del siglo XIX Remedios se encontraba dividida en ocho barriadas. Por aquellos años se efectuaban en las frías madrugadas del 16 al 24 de diciembre las misas de Aguinaldo, que culminaban con la de Gallo, vísperas de Navidad. Pero como no eran muchos los que, desafiando el sueño y frio, asistían al culto, al joven sacerdote Francisquito se le ocurrió la idea de producir un ruido infernal para despabilar el sueño de los vecinos. Bien pronto la iniciativa se fue extendiendo hacia otras zonas de la ciudad, hasta sumar a los restantes barrios, que desde entonces empezaron una encarnizada disputa por los mejores resultados.

Las Parrandas de la región central de Cuba, registradas por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, Unesco, en 2018 como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, son fiestas que en más de un siglo de existencia han trascendido como maneras de expresar gustos, preferencias, aptitudes y sentimientos de los participantes. Las de San Juan de los Remedios, primeras en el tiempo, forman parte ya de la idiosincrasia de un pueblo que no sería el mismo sin sus tradicionales celebraciones.

En el presente volumen, Erick González Bello y Juan Carlos Hernández Rodríguez recorren la historia de esa manifestación y las particularidades de sus componentes, en un ejercicio de síntesis que permite “hablar” a las esplendidas fotos de Julio Larramendi, en las que vibran no solo la belleza estandartes y fuegos artificiales, sino el intenso quehacer y la enorme pasión desplegada por los remédianos en aras del lucimiento de sus respectivos barrios. Hay que ir de la mano de esos buenos anfitriones para disfrutar ese hecho cultural.

La obra se estructura en siete partes, Las Parrandas de Remedios y de Cuba toda; Introducción; Música, faroles, estandartes e insignias; Trabajos de plaza; Las carrozas; Fuegos artificiales y el Museo de las parrandas. Es de destacar las fotografías históricas de este hecho cultural que permiten apreciar su devenir histórico y la colección de carteles de las parrandas.

Si no ha podido disfrutar de este derroche de creatividad criolla, ojalá este libro le dé el impulso necesario. Acá termino. Ah, y recuerden, si me ven por ahí, me saludan.