La Habana, Cuba. – Crecer en nuestra economía está determinado por la disciplina en el cobro de los impuestos que nosotros tengamos, afirmó el ministro de Finanzas y Precios, Vladimir Regueiro, en el análisis del trabajo del pasado año de la Oficina Nacional de Administración Tributaria.
Regueiro demandó a la ONAT tener un mayor protagonismo en la conducción de la vida económica de los territorios para convencer, esclarecer y reorientar las estrategias hacia mayor control y participación.
Esta es una organización que tiene una tarea fundamental: lograr disciplina fiscal para contribuir todos al mantenimiento de los gastos presupuestarios, subrayó el titular de Finanzas y Precios.
Llamó a fortalecer con rigor el enfrentamiento al incumplimiento de las obligaciones tributarias para que la sociedad tenga percepción de riesgo sobre esa infracción y adquiera mayor cultura impositiva.
Acciones de control tributario
La jefa de la ONAT, Mari Blanca Ortega, informó que durante el pasado año ese organismo logró cobrar una deuda tributaria superior a los 4 mil 700 millones de pesos, cifra que no obstante significó el 77 por ciento de los adeudos fiscales.
A más de 2 mil 600 contribuyentes se les aplicaron regulaciones migratorias y 224 quedaron desregulados tras pagar adeudos por 251 millones de pesos, explicó.
Ortega señaló que además por omisiones en las declaraciones de ingresos se retiraron autorizaciones, cerraron establecimientos y embargaron cuentas bancarias.
Por su parte, la Fiscal General de la República, Yamila Peña, llamó a los trabajadores de la ONAT a mantener el combate contra las indisciplinas tributarias, que muchas veces devienen graves delitos como la corrupción.