El ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez, dialogó este domingo en Moscú, con la comunidad cubana radicada en Rusia sobre los efectos de la ley Helms-Burton, inmigración y nexos con la Unión Europea, entre otros temas.

Rodríguez se refirió a los efectos del recrudecimiento del bloqueo norteamericano de casi 60 años contra Cuba, en especial, tras la activación del capítulo III de la ley Helms-Burton, de marcado carácter extraterritorial.

El Ministro aclaró que la Helms-Burton constituye un coctel de regulaciones y restricciones, muchas de las cuales son violatorias de las propias leyes estadounidenses.

Además, indicó que uno de los objetivos de la activación del capítulo III, algo que se había pospuesto desde 1996, es dañar el flujo de las inversiones extranjeras en la isla.

Rodríguez también explicó aspectos relacionados con las regulaciones migratorias, se refirió al diferendo en torno a la base naval estadounidense en la oriental bahía de Guantánamo y los nexos con la Unión Europea, entre otros temas.

Por su parte,  la Asociación de Cubanos Residentes en Rusia reiteró su condena a las agresiones del gobierno de Estados Unidos y su rechazo al bloqueo económico, comercial y financiero de Washington contra Cuba.

Además, la asociación repudió la activación del capítulo III de la ley Helms-Burton por su agresiva intención de despojar al pueblo de Cuba de todas las conquistas ganadas por la Revolución.

El sábado, al iniciar su visita oficial, Rodríguez sostuvo un fraternal encuentro con la misión cubana en Rusia y este lunes tiene previsto conversaciones con su similar ruso, Serguei Lavrov.

Tomado de Prensa Latina