La Habana, Cuba. – La bancarización es la respuesta estratégica a la necesidad del país de tener un sistema bancario modernizado y tecnológicamente más avanzado, afirmó el vicepresidente del Banco Central de Cuba, Alberto Quiñones.
Como en otras emisiones de la Mesa Redonda dedicada al tema, Quiñones reiteró que el proceso de bancarización es gradual, donde todos los actores económicos están en igualdad de condiciones.
Insistió que no es obligatorio que la persona realice los pagos por medios electrónicos pues el efectivo no desaparecerá, lo que sí es necesario es que los establecimientos tengan toda la amalgama de posibilidades para que el cliente sea quien decida cual medio de pago utilice, dijo.
Sobre los límites administrativos impuestos en algunas sucursales, por las condiciones logísticas actuales, el vicepresidente del Banco Central de Cuba (BCC) apuntó que es un problema coyuntural y desaparecerá paulatinamente.
Bancarización, comercio y tributos
El 70 por ciento de los establecimientos del comercio, dígase unidades gastronómicas, de servicios personales y técnicos, de alojamiento, y las bodegas, cuentan con plataformas electrónicas de pago.
La viceministra de Comercio Interior, Inalvis Smith, informó que como parte del diseño de incentivos se realiza un pilotaje para bonificar no solo a la población que emplee los canales electrónicos de pago, sino también al trabajador del sector que motive su uso.
Por su parte, el vicejefe de la ONAT, Juan Carlos Vilaseca, recalcó que la norma bancaria en vigor desde este mes establece que entre actores económicos debe mediar el pago por los canales electrónicos.
Destacó que el proceso de bancarización fortalece el control fiscal, transparenta las operaciones financieras, en tanto representará más ingresos para el Presupuesto del Estado.