La Habana, Cuba. – Los pueblos recuerdan hoy, a diez años de la siembra del Comandante Hugo Chávez Fría, la impronta del líder bolivariano que cambió la historia de Venezuela, dio derecho a los desposeídos, y rescató vergüenza y desarrollo a los más humildes y marginados.
Chávez demostró una ideología para aquellos más sufridos e inició y desarrolló una práctica política soberana e independiente para su pueblo que tanto quiso.
En tan señalada fecha, 5 de marzo, en que el Comandante Hugo Chávez pasó a la inmortalidad, se celebra el Día de la Dignidad Latinoamericana y Caribeña, que significa un clamor de paz, soberanía, justicia, libertad y solidaridad entre los pueblos.
El Día de la Dignidad Latinoamericana y Caribeña es impulso para seguir la impronta de nuestros próceres.
El ejemplo de Chávez tiene mucho que hacer
Cuando hoy los peligros y los retos desafían con fuerza brutal a nuestros pueblos de Latinoamérica y el Caribe, la obra chavista se agiganta como un sol y es guía en la lucha por la unidad de todos.
En Chávez y Fidel se concreta y conjuga el ideal martiano-bolivariano, ese que significa actualmente batallar contra el neocolonialismo y el imperialismo.
También continuar desarrollando el ALBA, teniendo como eje indispensable la unidad de los partidos políticos y movimientos de izquierda para alcanzar una Latinoamérica libre y construir la Patria Grande por la que tanta sangre se ha derramado.
El Día de la Dignidad Latinoamericana y Caribeña representa para nuestros pueblos la vigencia del legado del Comandante Hugo Chávez y, además, un manantial inagotable de patriotismo y amor a la libertad suprema del hombre.