La Habana, Cuba. – Varios analistas hacen notar por estos días un posible cambio de comportamiento en la oposición venezolana más recalcitrante, y que atribuyen a ciertas señales que tienen como origen la nueva administración estadounidense.

Se trata de que, a cuenta de funcionarios del Departamento de Estado, la retórica hostil contra las autoridades de Caracas está mostrando transformaciones y ya se obvia con determinado matiz el referirse al fantoche Juan Guaidó como presidente designado de Venezuela, aún cuando todavía algunos documentos intenten ensalzar su controvertida figura.

En pocas palabras, se trata de síntomas que para algunos hacen pensar en un giro político en Washington con respecto al gobierno de Nicolás Maduro, con relación al cual también parecen disminuir los reiterados ataques verbales.

Lo inusitado

Por estos días, y bajo el influjo de Washington, la oposición más extremista al gobierno bolivariano muestra otra táctica. Se trata de que algunos de sus dirigentes parecerían inclinados a involucrarse en el escenario electoral como vía para lograr sus propósitos, y ya hablan de “destrabar el juego” frente al chavismo, posiblemente en los comicios parciales de gran porte que han sido convocados por el Consejo Nacional Electoral.

Vale recordar que esos mismos opositores que hoy hablan de ir a las urnas, no tomaron parte en ninguno de los comicios convocados en Venezuela entre 2018 y 2020, por lo que apenas tienen presencia en las instancias de decisión.

Un auto aislamiento que no cuadra en el presunto juego democrático que hoy dice asumir la Casa Blanca.