Granma, Cuba.- Bayamo atesora varios sitios históricos escenarios de acontecimientos desde el inicio de nuestras luchas libertarias por Carlos Manuel de Céspedes, y durante la Guerra de liberación.
Entre esos lugares figuran la Plaza de la Revolución, primera denominada así en Cuba, la del Himno Nacional y el Parque Museo Ñico López, otrora Cuartel Céspedes asaltado hace 72 años por jóvenes de la Generación del Centenario.
Esa institución es Monumento Nacional, y en ella se le rinde especial tributo a los héroes y mártires de la gesta del 26, y a Fidel, cuyas cenizas reposaron en el Ñico López, al arribar a Bayamo su cortejo fúnebre en su trayecto hacia el cementerio Santa Ifigenia, de Santiago de Cuba.
De la otrora madriguera de la tiranía en Bayamo, solo se conserva el edificio del Club de Oficiales, que fue reconstruido íntegramente, y convertido en Parque Museo.