La Habana, Cuba. – El tratamiento a la situación de Cuba en Estados Unidos pretende un golpe de imagen con respecto a la realidad para beneficio de políticos desafectos con la Isla, asegura el diplomático José Ramón Cabañas.

El embajador de La Habana en Washington entre 2015 y 2020, dijo: Por ello no sorprende que los disturbios del pasado 11 de julio causaran un mayor impacto virtual que real.

Los actuales sucesos – sostuvo Cabañas- pretenden dar un golpe de imagen para cambiar la percepción sobre la situación de la nación caribeña y los demócratas miran para otro lado al escuchar hablar de socialismo o Revolución.

Aseguró que la persecución contra Cuba recibe millonarios fondos que justifican la denominada industria del odio, que insisten en eliminar los viajes, remesas y vínculos, también, dicha campaña desatada en redes el 11 de julio pretende causar un efecto en la sociedad estadounidense de confusión y preocupación.