Presente en la cartera de oportunidades de negocios del sector para este año, implementar nuevos proyectos que permitan diversificar la producción de níquel y cobalto es uno de los retos del grupo CUBANÍQUEL.

A ello se suma restablecer las capacidades productivas y los índices de eficiencia metalúrgica y energética de las fábricas productoras de esos minerales metálicos en el país.

Hoy los trabajadores de las empresas Moa Níquel S.A. y la Comandante Ernesto Che Guevara, en Holguín, se concentran en utilizar los yacimientos minerales y depósitos de colas resultantes de las actuales explotaciones mineras, que permitan emplear racionalmente los recursos, y mejorar las condiciones ambientales.

Para ello, el sector minero cubano dispone de un personal altamente calificado, con experiencia en la explotación de plantas metalúrgicas de alta complejidad.

Importantes reservas

Se considera que las reservas cubanas de níquel, en sus diferentes categorías, representan el 12 por ciento de las reservas mundiales en depósitos lateríticos sobre peridotitas.

Según los estudios de empresas extranjeras y cubanas, el almacenamiento probado de níquel es de 800 millones de toneladas y el estimado es de 2 mil millones.

Ese mineral se utiliza fundamentalmente para la producción de aceros inoxidables y aleaciones especiales, y hoy está presente en casi todas las esferas de la vida cotidiana, desde la salud y las comunicaciones, hasta el transporte.

Por su parte, las reservas de cobalto en el país se estiman en el 25 por ciento de las del orbe, lo cual ubica a Cuba en el cuarto lugar en el mundo.

El cobalto se emplea en superaleaciones de alto rendimiento para la industria de motores, turbina de los aviones y válvulas de motor.