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El próximo 31 de julio comenzará la huelga de hambre de 11 militantes de los movimientos sociales, en demanda de la libertad del ex-presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva.

El ayuno formará parte del proceso de movilización popular que culminará el 15 de agosto, cuando el Partido de los Trabajadores registrará ante el Tribunal Superior Electoral la candidatura presidencial de Lula, señaló Gilberto de Carvalho, uno de los más próximos asesores del popular líder.

El anuncio de la huelga de hambre de integrantes de los movimientos sociales se produjo después que Lula diera a conocer un manifiesto que exige al Supremo Tribunal Federal de Brasil respetar el Estado Democrático de Derecho.

En el documento, el ex-presidente denuncia las maniobras de ministros de la Corte Suprema que –aseguró- impiden juzgar con imparcialidad los recursos presentados por su defensa.

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