
John Bolton es un dinosaurio de la política exterior imperial
La Habana, Cuba. – Su nombre es John Robert Bolton, nació en Baltimore en 1948. Neonazi de pura cepa, no solo por su imagen, ha servido como representante permanente ante la ONU a gobiernos republicanos y demócratas.
A partir del 9 de abril de 2018 es Consejero de Seguridad Nacional de Donald Trump. Desde ese cargo ha sido un relevante artífice de la muy cuestionada y enfermiza actuación de Trump.
Mantiene una íntima relación en Washington con apéndices del actual régimen genocida de Israel. Figura poderosa de la Asociación Nacional del Rifle, que compra y vende elecciones en Estados Unidos.
Cómplice de maquinaciones ejecutadas por la Agencia para el Desarrollo Internacional (USAID), expulsada de naciones por su involucramiento en actividades subversivas. He ahí una muestra de su tenebrosa hoja de servicios.
Brujo de la Ley Helms-Burton
El 1ero. de Mayo en Cuba la consigna es No al título tres de la Helms-Burton. Resulta impresionante la unanimidad del pueblo que asistirá a los desfiles en todo el país. Además, respaldado por el rechazo de países europeos y otros continentes a tal disposición.
Desde 1996, hasta aliados de Washington en la OTAN manifestaron su inconformidad. Es evidente los tropiezos que tal política impone a la diplomacia estadounidense.
La Asamblea General de la ONU le ha propinado ya duros golpes a la política de bloqueo y organizaciones de masas y sociales en el mundo han hecho lo mismo. O sea, el bloqueo y su Título III de la Helms-Burton han contribuido a un mayor aislamiento de Estados Unidos. ¿Motivo? El complot de una pandilla de origen cubano ubicada en Miami cuyos jefes radican en Washington.