Compartir

En las últimas semanas, el mundo de la inteligencia artificial no ha dejado de hablar de Nano Banana, el apodo peculiar de una IA generativa de imágenes que rápidamente se viralizó en redes sociales.

Sucede que Google tiene una larga tradición de usar nombres curiosos y poco convencionales en sus proyectos internos.

Desde Android, que en su momento nombraba cada versión con postres, la compañía nunca ha temido salirse de lo técnico para generar cercanía con el público.

En este caso, Nano Banana nació como un nombre en clave interno, mientras el modelo de imágenes aún estaba en desarrollo. Su sonido simpático y fácil de recordar lo convirtieron en un apodo perfecto, que escapó rápidamente al círculo privado de Google y se volvió viral en la comunidad tecnológica.

Competidor directo.

Pese al éxito del apodo de la nueva herramienta de Google, el nombre oficial del modelo es Yemin AI:5flashimach.

Esta ofrece a los usuarios la posibilidad de generar y editar imágenes con Inteligencia Artificial a un nivel nunca antes visto.

Entre sus funciones más destacadas está cambiar fondos, objetos, estilos y detalles, simplemente con introducir un prompt.

También permite mantener la identidad de personas y personajes en múltiples escenas, refinar imágenes paso a paso, con mejoras acumulativas, y ser hasta seis veces más rápida que otros modelos competidores.

Estas características han llevado a muchos entendidos en el tema de las redes sociales y del ciber-mercado a considerar la herramienta como un competidor directo de Photoshop y de otros generadores de imágenes como Mid Jorny o Dali.

Nano Banana, fenómeno viral.

Lo más interesante es cómo un nombre tan extraño se convirtió en una pieza clave de la estrategia de comunicación de Google.

Lo que empezó como un COUD-NEIM interno terminó en un fenómeno viral que generó expectación antes del lanzamiento oficial, diferenció al modelo en un mercado saturado de herramientas de inteligencia artificial y conectó con la audiencia a través del humor y la curiosidad.

En resumen, Nano Banana es la prueba de que incluso en un sector altamente técnico, los detalles creativos y divertidos pueden convertirse en poderosas herramientas de marketing. La plataforma,  más que un generador de imágenes, es un ejemplo de cómo la tecnología, el marketing y la cultura digital se entrelazan.

Por: Miguel Alejandro García

Etiquetas: -