Antes del siglo XIX, los símbolos utilizados para identificar los servicios médicos de las fuerzas armadas variaban en función del país de origen.
A mediados de esa centuria, lo que después se convertiría en el Comité Internacional de la Cruz Roja, tenía entre sus objetivos adoptar un único signo que estableciera la obligatoriedad de respetar a los servicios médicos de las fuerzas armadas.
La selección del símbolo de la cruz roja sobre fondo blanco como emblema universal no obedeció a motivos religiosos, sino a que figuraba en la bandera suiza, como reconocimiento al país promotor de esa iniciativa.
En el año 1929 una conferencia diplomática también aceptó el emblema de la media luna roja como señal distintiva en los países islámicos. Entonces la organización pasó a llamarse oficialmente Cruz Roja Internacional y Movimiento de la Media Luna Roja.