Con la unidad como bastión, miles de argentinas se alistan para sumarse al gran paro internacional de mujeres el próximo 8 de marzo, en el que reivindicarán derechos esquivos a lo largo de décadas.
Cada una desde sus luchas, las despedidas en estos meses por el ajuste del gobierno, las que batallan por el aborto legal, las de los pueblos originarios, las inmigrantes, las afrodescendientes, todas en un mismo grito pedirán parar ya con el patriarcado que han lacerado la vida de muchas de ellas.
Liliana Daunes, destacada activista feminista, apuntó que mañana las mujeres volverán a parar el país y el mundo, y apuntó que en esa cita se replicará en al menos 60 naciones.
En Argentina la medida de fuerza comenzará con un ruidazo en los espacios de trabajo y en horas de la tarde arrancará la marcha, que se prevé multitudinaria, hacia la Plaza de los dos Congresos, sede del poder legislativo