La Habana, Cuba. – La humanidad celebra hoy el Día Mundial de la Alimentación con el riesgo de sufrir otro año de hambre récord por la crisis alimentaria mundial, que empuja a más personas a ser víctimas de ese flagelo.
Durante los primeros meses de 2 mil 22, el número de hambrientos en el mundo creció en más de 63 millones con respecto al año anterior, por lo que el plan de operaciones del Programa Mundial de Alimentos, para este año es el más ambicioso de su historia.
Hambre aguda amenaza la vida de 345 millones de personas en el mundo.
Mientras, el gasto militar mundial supera por primera vez los 2 millones de millones de USD, recursos que deberían encaminarse a garantizar el objetivo de hambre cero y alcanzar los #ODS de la #Agenda2030. pic.twitter.com/Eltf7w3lvy
— Bruno Rodríguez P (@BrunoRguezP) October 14, 2022
Las dificultades alimentarias que vive el planeta son cada vez más graves, fruto de una confluencia de crisis causadas por las alteraciones climáticas, los conflictos y las presiones económicas.
Sobre esa base el Programa Mundial de Alimentos amplió este año sus objetivos de asistencia alimentaria, batallando contra la hambruna en cinco países Afganistán, Etiopía, Somalia, Sudán del Sur y Yemen.
Alerta la ONU niveles de hambre en Haití
Un informe de las Naciones Unidas (ONU), revela que, por primera vez en Haití, hay personas que están en la fase cinco, la más elevada de la clasificación sobre inseguridad alimentaria.
De acuerdo con este nuevo informe de la ONU, más de 4,7 millones de personas sufren hambre aguda en la nación caribeña, y 19 mil enfrentan condiciones de hambruna catastrófica.
La terrible inseguridad alimentaria se ha detectado principalmente en el barrio Cité Solei, en Puerto Príncipe, donde una coalición de pandillas ha bloqueado una importante terminal de combustible en protesta contra un plan para recortar los subsidios a los carburantes.
Tal como indica la nota de la entidad mundialista, la crisis ha atrapado a los haitianos en un ciclo de creciente desesperación, sin acceso a alimentos, combustible, mercados, empleos y servicios públicos, lo que ha paralizado el país.