La Habana, Cuba. – Vuelve el arte como agente transformador de la sociedad, y lo hace desdibujando acciones para que la magia de lo cultural y lo social se abracen en solución creativa a problemáticas de la comunidad.
El municipio habanero de Diez de Octubre da muestra de cómo los ciudadanos se pueden unir y mejorar su entorno, y donde las expresiones visuales apuestan por conjugar espacios disímiles y acercar el arte a los lugareños.
Como verdadera metamorfosis, el arte está presente en las acciones de restauración de parques, y lo hace a través de las prácticas del Proyecto Cultural Comunitario Muraleando, cronista de recreación sana y reflejo de un pueblo que se crece.
Adoptando al hombre como ente central del cambio, se prevé crear conciencia sobre la obra social que se lleva a cabo, y en ese camino, que la comunidad conviva con el arte es parte fundamental para completar el viaje.