Compartir

Guantánamo, Cuba. – El consagrado maestro de las artes plásticas Ángel Laborde Wilson, conocido como el pintor de las caracolas y singular exponente del espiralismo creativo, falleció en Guantánamo, a los 80 años de edad.

Este artista se paseó con destreza entre la pintura, el dibujo, la caricatura, escultura y la cerámica; y conformó el claustro de profesores de la Academia San Alejandro, de La Habana.

Una decena de escuelas en Cuba testimonian el legado pedagógico de Laborde, y por su contribución al desarrollo y enseñanza de las artes visuales en su provincia es considerado vital en esa esfera.

La forma del caracol, siempre en ascendente movimiento, se convirtió en su filosofía espiritual y creativa, que delinea sintetizando formas, a partir de expresividad en los trazos y contrastes de colores templados inspirado en la espiral logarítmica, proveniente de la geometría.