La Habana, Cuba. – La Associated Press (AP)reveló, días atrás, que en Estados Unidos médicos y enfermeros que encaran la pandemia dicen estar exhaustos y desmoralizados.

Ellos desafían la saturación de los hospitales por la impresionante ola de contagios y muertes que les inundan. Tal situación obliga a gobernadores a establecer medidas drásticas para tratar de contener la Covid-19.

Un ejemplo, Andrew Cuomo, de Nueva York, ordenó la prohibición de ciudadanos en restaurantes, alegando el incremento de ingresos hospitalarios. Además, Tom Wolfgobernador de Pensilvania, suspendió los deportes en las escuelas, clausuró gimnasios, cines y casinos.

El Proyecto de Rastreo Covid reveló la semana pasada que más de 107 mil estadounidenses estaban ingresados y alrededor de 290 mil fallecieron. La AP recordó que los hospitales están desbordados.

Personas aterradas

Cassie Ban, enfermera intensivista en Indiana University Health dijo que antes cuidaban dos pacientes por turno pero ahora atienden a cuatro o cinco. Ella quisiera que las personas vieran a enfermos aterrados y solos.

La AP refiere la necesidad de camas, mascarillas y equipos médicos incluyendo personal especializado, lo que resulta inquietante para quienes están en la muy temida zona roja.

La enfermera intensivista Kiersten Henry de Maryland, declaró que siente haber corrido un maratón así como que está en el segundo junto a personas muy agotadas.

Dijo también que muchos médicos se sienten frustrados al recibir indiferencia y desprecio de estadounidenses cuando les orientan usar mascarillas.

Raju Mehrta, médico intensivista en el Advocate Health and Hospital en Chicago, indicó que al inicio de la pandemia muchos tenían energía suficiente para enfrentarla, pero eso empieza a desmoronarse.