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El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, denunció hoy que la ley Helms-Burton aplicada por Estados Unidos para destruir a la Revolución, agrede la independencia y la dignidad de la Isla.

Representa el anhelo anexionista y colonial, pretende provocar el cambio del sistema político y económico en Cuba; es una afrenta a nuestra soberanía y dignidad; basta ya de amenazas imperiales, señaló en su cuenta en la red social Twitter.

La ley Helms-Burton codifica el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos a la mayor de las Antillas, y con sus cuatro títulos busca asfixiar al país mediante una injerencia directa en sus asuntos internos.

Esa iniciativa norteamericana tiene además un marcado carácter extraterritorial, al pretender impedir la inversión extranjera en la isla, por lo que el jefe de Estado cubano la calificó de absurda e ilegal.