La Habana, Cuba. – Las intensas y persistentes precipitaciones asociadas a la tormenta tropical Imelda, que avanza por mares al norte de la región oriental, han provocado afectaciones en todas las provincias del oriente cubano.
El fenómeno meteorológico mantiene bajo tensión a las autoridades locales y a la población debido a la magnitud de las lluvias y sus consecuencias.
En la provincia de Santiago de Cuba se han reportado alrededor de 11 derrumbes parciales de viviendas y muros de contención. Aunque no se registran víctimas mortales ni heridos, las zonas más vulnerables, en particular las cercanas a laderas y muros, han sufrido deslizamientos de tierra por la saturación de agua acumulada. La defensa de estas áreas continúa siendo una prioridad.
A pesar de que persisten las lluvias, las autoridades han visitado los sitios más afectados, sosteniendo intercambios con la población y reforzando la vigilancia.
El llamado a los santiagueros es a no cometer imprudencias y mantenerse informados mediante los canales oficiales de comunicación.
Situaciones similares se viven en las provincias de Granma y Guantánamo, donde los aguaceros han provocado desbordamientos de ríos y arroyos. En zonas montañosas, los deslizamientos y derrumbes han generado riesgos adicionales.
Brigadas de la Defensa Civil y la Cruz Roja recorren áreas inundadas o con peligro potencial para poner a salvo a personas que pudieran encontrarse atrapadas.