La Habana, Cuba. – La exposición Del Espejo y la Paciencia del pintor cubano Luis Enrique Camejo rinde tributo a La Habana del siglo XX, una ciudad que hoy lucha por conservar el esplendor de aquellos tiempos.
De acuerdo con el artista, en la muestra prevalece el empeño por visualizar dos momentos fundamentales de la nombrada Ciudad Maravilla y sus diferencias, uno que abarca de 1920 hasta 1950 del siglo pasado y otro enfocado en la contemporaneidad.
La inquietud surge porque La Habana fue una joya de América, una de las primeras villas de la colonia española y una urbe relevante que mostraba importancia cuando todavía algunos territorios del continente eran aldeas, expresó el autor.
Precisó Luis Enrique Camejo que su obra evidencia el civismo, los patrones de moda en cuanto al vestuario, así como las diversas dinámicas poblacionales del pasado y el presente.