Todavía algunos creen que el bloqueo de Estados Unidos impuesto a la Isla es una exageración o un pretexto de los cubanos para justificar escaseces, en particular de alimentos, que bastante nos ha golpeado por casi 60 años.

Tampoco se pueden desdeñar, por la ubicación geográfica unida a otras causas, los embates a Isla de fenómenos naturales, y de otros no tan naturales como la desertificación, ambos muy perjudiciales para la Agricultura, porque los suelos se van degradando.

Lo peor para la Agricultura cubana no han sido las copiosas lluvias o las prolongadas sequías porque se han logrado minimizar riesgos y vulnerabilidades.

Lo más perjudicial para la Agricultura Cubana, que impide que tengamos buenas cosechas, mejor alimentación y un campo más productivo, ha sido el bloqueo imperialista.

Detrimento en el campo cubano por el bloqueo

Los agricultores cubanos tienen que hacer maravillas, incluso con inventos, para lograr sus cosechas.

Las restricciones financieras y comerciales impuestas por el bloqueo de Estados Unidos ocasionan baja productividad y calidad; y obliga al Estado a importar alimentos caros para satisfacer las necesidades de la población.

El cerco imperialista impide adquirir tractores, sistemas de riego, bombas de agua y piezas de repuesto. Limita el acceso a insumos como el combustible, piensos, fertilizantes, herbicidas, plaguicidas, productos farmacéuticos veterinarios y otros como las nuevas tecnologías agrícolas.

Pero Cuba se mantiene firme, porque aunque Estados Unidos pretenda matarnos de hambre, no cejaremos en la lucha para que se ponga fin a la genocida política.