En una escena poco común, la ciudad de Roma amaneció cubierta por una capa de nieve como consecuencia de la ola de aire frío de origen ártico, la cual recorre Italia de Norte a Sur.

En la madrugada se inició la nevada y luego se transformará en una fina y pertinaz llovizna, mientras el manto blanco de un espesor estimado entre 3 y 4 centímetros se disolverá y convertirá en hielo, cuando las temperaturas desciendan nuevamente por debajo de cero grados centígrados.

Asimismo, el gobierno de Francia reactivó desde este lunes el plan Gran Frío ante la llegada de una ola de bajas temperaturas que afectará buena parte del territorio nacional durante toda la semana.

De acuerdo con los pronósticos meteorológicos, un aire glacial procedente de Rusia afectará principalmente las regiones del norte, el este y el centro del país, y generará temperaturas de 10 grados por debajo de lo habitual para la temporada.