Sesina el IX Congreso de la UNEAC

La Habana, Cuba. Con la certeza de su responsabilidad social en tiempos tan complejos como éstos para defender la cultura nacional, la Unión de Escritores y Artistas de Cuba realiza este fin de semana las jornadas finales de su IX Congreso, dedicadas a la memoria de Fidel.

A la sesión inaugural en el Palacio de las Convenciones asistieron Esteban Lazo, miembro del Buró Político del Partido y presidente del Parlamento; Víctor Gaute, del Secretariado del Comité Central y jefe del Departamento Ideológico y el ministro de Cultura, Alpidio Alonso.

Miguel Barnet, presidente de la UNEAC, destacó que las asambleas en secciones, filiales y comités municipales permitieron revisar a fondo el funcionamiento de las estructuras y propiciar un diálogo más fecundo con las instituciones.

ubrayó que el ciclo completado con asambleas en los comités provinciales hizo que por primera vez estén representados todos los territorios.

Estandarte de la verdad

En su informe al Congreso de la UNEAC, Miguel Barnet valoró cómo el Ministerio de Cultura ha tenido en cuenta a la organización para discutir y enriquecer las prioridades institucionales y definir el Programa de Desarrollo de la Cultura.

Recordó que el desarrollo cultural no sólo compete al movimiento intelectual y artístico sino a toda la sociedad, y subrayó el acompañamiento del Partido, en sus objetivos programáticos por consolidar la política cultural de la Revolución en un clima de unidad y libertad.

La UNEAC como laboratorio de ideas -reflexionó su presidente- siempre ha sido estandarte de la verdad y la diversidad cultural; luchamos contra el pensamiento único que lacera las conciencias y defendemos el debate profundo.

Barnet insistió en que es necesario y urgente fomentar los valores éticos y estéticos, a fin de favorecer el crecimiento integral del ser humano, gran protagonista del socialismo.

La Cultura es brújula

En su informe al IX Congreso de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, su presidente Miguel Barnet aseguró que la cultura es la brújula que indica el camino y acompaña el esfuerzo para desplegar las fuerzas productivas en pos del socialismo próspero y participativo.

Dijo que frente a la hostilidad imperial, mantener la coherencia de la política cultural es tarea prioritaria, y el principal desafío está en la batalla contra los mensajes seudoculturales asociados a la exaltación del consumismo y la desvalorización de la cultura nacional.

Nuestra más alta aspiración es la conquista del humanismo revolucionario, afirmó Miguel Barnet y evocó a Fidel como permanente fuente de inspiración para la vanguardia intelectual y artística.

Los delegados votaron por la integración del Consejo Nacional de la UNEAC y los ejecutivos de las asociaciones nacionales, cuyos resultados se conocerán mañana.