La Habana, Cuba. – La condena de la comunidad internacional al bloqueo contra Cuba será un poderoso mensaje de orden político, legal y ético dirigido a la administración que asuma la Casa Blanca tras las elecciones de noviembre, subrayó este jueves Bruno Rodríguez.
El canciller cubano presentó a la prensa, y previamente ante el cuerpo diplomático, la actualización del informe que debatirá y aprobará la Asamblea General de la ONU los días 29 y 30 de octubre.
En dicho documento se exponen los principales daños ocasionados entre marzo de 2023 y febrero de este año, calculados en más de 5 mil millones de dólares, cifra superior a la reportada en el informe anterior.
Rodríguez afirmó que, según estimados, de no existir el bloqueo, el Producto Interno Bruto de Cuba en 2023 a precios corrientes, pudo haber crecido cerca del 8 por ciento.
El bloqueo impide el desarrollo de Cuba
El canciller Bruno Rodríguez reconoció deficiencias internas en la gestión económica del país, pero reiteró que el peso fundamental y determinante en el freno al desarrollo de Cuba lo tienen la agudización y el recrudecimiento extremo e inédito del bloqueo estadounidense.
En ese sentido, aportó cifras que ejemplifican cuánto podría garantizarse en el cuadro básico de medicamentos, la canasta básica, el transporte público y el programa de viviendas, con meses o apenas días sin que existiera la asfixiante política de Washington.
Cuba está sometida a una guerra económica, que tuvo una expresión de extrema crueldad durante la pandemia, reafirmó Rodríguez, y recordó las negativas de bancos a prestar servicios a entidades cubanas.
Denunció el impacto de la inclusión de la Isla en la lista de países que Estados Unidos considera como patrocinadores del terrorismo, y deviene una de las medidas más dañinas.
Golpes a los derechos humanos en Cuba
El bloqueo es el sistema de medidas unilaterales coercitivas más abarcador, integral y prolongado de la historia que se haya aplicado contra país alguno, subrayó el canciller Bruno Rodríguez.
Calificó de discriminatorias y selectivas las ventas de alimentos de Estados Unidos a la Isla, pues exigen pagos adelantados, se prohíben los créditos, incluso privados, y la transportación en barcos internacionales.
Son suministros que requieren licencias, autorización del gobierno de Washington, y por eso es inadmisible considerar a Estados Unidos como un socio comercial, subrayó Rodríguez
Añadió que el informe que debatirá en octubre la Asamblea General de la ONU demuestra los daños humanitarios a familias cubanas, los perjuicios, incluso al sector privado de la economía, y argumenta por ejemplo, cómo el bloqueo pone énfasis en obstaculizar la recuperación de la industria turística.