A estas alturas del juego, es evidente que para buena parte de la sociedad brasileña, la elección de Jair Bolsonaro para presidente del país ha sido uno de los peores baches políticos en el devenir del gigante sudamericano
A estas alturas del juego, es evidente que para buena parte de la sociedad brasileña, la elección de Jair Bolsonaro para presidente del país ha sido uno de los peores baches políticos en el devenir del gigante sudamericano
La obsesión de la Casa Blanca por desbancar a la Revolución Bolivariana, sigue su curso agresivo y desbocado. Ahora se trata de que Washington pretende que las elecciones parlamentarias que deberán celebrarse este año, cuando la pandemia del nuevo coronavirus lo permita, deben convertirse, por orden oficial gringa, en “una limpieza política nacional”.
Como fue calculado y moldeado por la tradicional dirigencia de su Partido Demócrata, el aspirante Joe Biden, ex segundo de Barack Obama en la Casa Blanca, logró finalmente su nominación para enfrentarse a Donald Trump
Si el enfrentamiento al nuevo coronavirus implica para muchos solidaridad, esfuerzo, entrega y apoyo a los demás, para otros está siendo sinónimo de negocios, indignidades y sucios comportamientos.
La realidad y consecuencias de la COVID-19 en América Latina han puesto en tela de juicio la pretendida eficacia que se atribuyen gobiernos de la derecha política en esta parte del mundo.
Recientemente, en una entrevista pública, el actor Robert de Niro calificó al presidente Donald Trump de incapaz, ridículo e interesado únicamente en asegurarse el continuar al frente de la Casa Blanca, luego de los comicios de noviembre.
Parecería que de alguna forma estamos en días de pandemias…en absoluto plural. La número uno y más mortal de ellas, las del Covid-19.
Cuando todo lo inédito de estos días de pandemia global haya terminado, junto a las celebraciones que con toda justicia podamos otorgarnos, no podrá faltar también la más profunda reflexión
Washington y la Brasilia de Jair Bolsonaro decidieron profundizar su alianza militar contra las fuerzas progresistas a escala latinoamericana y global.
A menos que a última hora se “caiga el mundo”, el presidente Donald Trump saldrá airoso este miércoles 5 de febrero del juicio político en su contra