La Habana, Cuba. – Si gustas de la artesanía, con seguridad te has acercado a los Antiguos Almacenes San José, hoy Centro Cultural, situado en el último tramo de la Avenida del Puerto -conocido como Desamparados-, muy cerca de la iglesia de San Francisco de Paula.

Las monumentales naves que componen el depósito, fueron erigidas casi a finales del siglo XIX por el arquitecto Adolfo Sáenz Yáñez, para liberar a las casas señoriales de esas funciones, y por consiguiente, a la vía pública de más de un millón de viajes de carretas que transportaban las mercancías hacia esos destinos.

A su lado, un innovador muelle para que vapores y goletas no utilizaran lanchas. A pesar de su cercanía al mar, esta obra maestra se conserva en perfecto estado, quizás por las más de 3 mil toneladas de estructuras de acero fundidas en Bélgica, más hormigón y cantería por valor de 3 millones de pesos de la época.

Un renovado centro cultural para todos los gustos

En 2009, la Oficina del Historiador de La Habana convirtió los Antiguos Almacenes San José, en un espacio cultural con exposiciones de pintura y fotografía, representaciones teatrales y actividades recreativas para los niños.

El centro alberga el mercado de artesanía más grande de La Habana, con más de 330 pequeños puestos con todo tipo de souvenirs.

Ahora, como parte de los festejos por los 500 años de La Habana, se reinauguró la instalación, en cuya segunda planta, residentes y visitantes podrán encontrar opciones de variados servicios gastronómicos, floristería, pintura, grabados, fotografías, entre otras ofertas de artículos confeccionados por artesanos y artistas.

Todo compactado en un mismo espacio, lo cual resulta en la comodidad de los clientes que diariamente acuden en su procura.