Artemisa, Cuba.- Artemisa está repleta de historias que vinculan a su gente con el Comandante en Jefe Fidel Castro, incluso mucho antes del Triunfo de la Revolución, de cuando un grupo de jóvenes lo acompañaron en las acciones del Cuartel Moncada.
La historia de hoy presenta a dos adultos mayores de 63 años que relacionan a Fidel con el nacimiento de una Cooperativa de Producción Agropecuaria en Güira de Melena, donde están las tierras más productivas de la joven provincia.
Emenegildo Pérez y Fernando Lemus trabajan en la CPA Niceto Pérez desde el año 1980, y recuerdan con detalle cada vez que el Comandante llegó a reunirse con la junta directiva para trazar estrategias de producción.
Unas veces en activo diálogo con los obreros que labraban los campos de sol a sol, otras en medio de las plantaciones de uva que por ese entonces eran frondosas y prolíferas.
La sonrisa que inspiraba confianza
Cuando conversaba con los campesinos, Fidel siempre tenía esa sonrisa dibujada en el rostro que te impregnaba confianza, recuerda Emenegildo Pérez, trabajador de la Cooperativa de Producción Agropecuaria Niceto Pérez, de Güira de Melena, en Artemisa.
La CPA, fundada en 1979 por el líder histórico, conserva un sitial cargado de fotos y recuerdos que muestran sus múltiples visitas al centro.
Emenegildo peina canas, pero en aquel entonces era muy joven, y aunque los años han pasado también por su memoria, asegura que recuerda cada vez que Fidel entraba con su uniforme verde olivo que lo hacía lucir más inmenso de estatura.
Tampoco olvida la sonrisa que siempre tenía cuando de manera segura ayudaba a encontrar la solución a un problema y que también los impulsó a convertirse en hombres consagrados y solidarios como él mismo.