La Habana, Cuba.- Exacta es la denominación de BUZO para quien se dedica a la antihigiénica actividad de hurgar en depósitos de basura buscando objetos que se le antojen negociables.

Más original y hasta humorística es la designación de ESCACHALATA con que nombran al reciclador de envases de refrescos y cervezas que aplasta y comprime para que ocupen menos espacio. MACETERO llaman al transporte particular que cobra pasajes elevados, y a su dueño u operario.

Esos vocablos revelan la inventiva de los hablantes al nombrar lo novedoso, aunque no sea siempre afortunada la elección de la palabra.

Por ejemplo, en una región oriental llaman CASCORRO o CASCORRA a la persona zamba, lo cual es un error, porque el vocablo correcto es CASCORVO (o sea: corvo o curvo de cascos).

Bautismos populares

Dicen que VIROLLA es la voz que se levanta entre los muchachos que juegan a las bolas, para abalanzarse sobre la olla y saquearla, lo cual NO parece justo ni, por supuesto, decente…

Tampoco lo es aprovechar los medios del centro de trabajo para hacer largas llamadas locales o de distancia, por lo que a esos equipos los han bautizado con sarcasmo TELÉFONOS PETROLEROS, ya sea porque el aprovechador no paga por usarlos, o por el derroche que representa su empleo sin control.

Pero mucho más ingenioso resulta el nombre que ha dado el pueblo a los asientos del fondo de los ómnibus interprovinciales Yutong, que son rectos y no se reclinan. Por esas cualidades, que son virtudes entre los humanos, ya la gente los conoce como “los cinco héroes”.