La Habana, Cuba.- Para Isabel Santos y Luis Alberto García, “ya no es antes”. El público fiel que ha seguido sus largas y exitosas travesías por las pantallas del cine nacional e internacional, los descubre hoy, juntos –como tantas veces- en una metamorfosis que no deja de despertar emociones, y que se presenta, casi tan perfecta, como aquella química de una juventud en “Clandestinos”.

Lester Hamlet apostó por ellos en su última producción cinematográfica, “Ya no es antes”, y confesó, en conferencia de prensa en el Hotel Nacional, que si hoy su cinta compite en la categoría de Largometrajes de Ficción del 38 Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana, es, en buena medida, gracias a esos “dos grandes actores”.

La historia de Esteban y Maira (Luis Alberto e Isabel) fue estrenada este sábado en el Cine Chaplin, con el mayor premio que puede recibir un realizador y su elenco: la ovación de un público que no escatimó en compartir emociones.

La vida, la comunicación –o no- de una pareja en un espacio único y cerrado; la ausencia de exteriores; el uso de un tiempo real, donde el antes está solo en el recuerdo de los personajes y el después, no existe; lo que obliga al espectador estar durante más de una hora únicamente frente a dos personajes, fueron apuestas bastante atrevidas de Hamlet teniendo en cuenta que ese tipo de narrativa no es común en el cine nacional.

“¿Seremos capaces de mantener la atención del público?”, esa era la gran interrogante de Luis Alberto García, que si bien, afirma, no le quitaba el sueño, lo inquietó durante todo el rodaje, como inquietaba también a quienes conocían de antemano la estructura narrativa del filme.

El guión de Hamlet y Mijaíl Rodríguez, a partir del texto Weekend en Bahía, una obra del desaparecido Alberto Pedro y uno de los mayores éxitos de la dramaturgia cubana de los años 80 y principios de los 90, se presentó firme y con un equilibrio en el empleo de términos obscenos, digno de resaltar, sobre todo en estos tiempos donde se abusa del lenguaje vulgar.

Una vez más, el director apostó por la música de Harold Lopez Nussa, quien brilló con la intensidad de siempre, al igual que Raúl Pérez Ureta, quien, como tantas ocasiones, regaló una fotografía sencillamente espectacular.

Pero, el mayor acierto estuvo en la elección de los actores, aunque el papel, en un inicio, no era para ellos. “Esta película estaba pensada para otros, y al final, por una cosa o por la otra, Lester me llamó y la verdad es que yo me emocioné muchísimo”, recordó Isabel Santos.

“Por mi parte, nunca había trabajado con Lester. Desde el inicio Isabel me dijo: prepárate que te van a dirigir. Y, sin duda, disfruté mucho de la película y por supuesto, para mi es maravilloso trabajar con Isabel”, añadió Luis Alberto.

Como casi todas las películas cubanas, “Ya no es antes” no se divorció de la realidad nacional y de las nuevas circunstancias que vive el país y aunque cuenta una historia de amor, el mismo Hamlet reconoce ser un director que retrata una contemporaneidad de la que no puede desligarse.

Por eso, la Cuba de hoy también está en escenea y por eso Luis Alberto la dedicó a todos los cubanos donde quiera que se encuentren.