El informe Reducir las diferencias, presenta nuevas evidencias que respaldan una predicción poco convencional.

Un estudio  del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), indica que en 51 países, invertir en la salud de los niños más pobres y las comunidades más necesitadas es costo efectivo y reduce las desigualdades.

El informe Reducir las diferencias, presenta nuevas evidencias que respaldan una predicción poco convencional que el organismo realizó, e indica que el mayor costo que supone llegar a los niños más pobres se compensa por los mejores resultados que generan inversiones.

“Las pruebas son convincentes, invertir en los niños más pobres no sólo es correcto en principio, sino también práctico, salvar más vidas por cada divisa gastada”, dijo el Director Ejecutivo de UNICEF, Anthony Lake.

Esa es una noticia para los gobiernos que trabajan en la tarea de poner fin a todas las muertes infantiles prevenibles en un momento en que el dinero cuenta.