El concierto ofrecido este jueves por el Septeto Santiaguero, en una de las plazas principales de la música popular cubana, festejó la reciente obtención de su segundo premio Grammy y cumplió una promesa con sus seguidores.

En la intersección de Carretera del Morro y Calle Tres, en Santiago de Cuba, considerada por muchos como el termómetro de las orquestas en el país, los músicos compartieron con el público los temas de A mí qué, tributo a los clásicos cubanos, el disco ganador.

Fernando Dewar, director de la agrupación, agradeció a las autoridades santiagueras la oportunidad de que esa multitudinaria presentación forme parte de la programación por los 60 años de la Revolución Cubana.

El también tresero y productor afirmó que el Septeto es obra y parte de ese acontecimiento histórico que marcó desde entonces para bien la vida en Cuba, donde la cultura ha resultado uno de los sectores de mayor impacto.