Matanzas, Cuba.- Estudios de la Delegación del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, en Matanzas, ponderan la necesidad de proteger los ecosistemas costeros ante el impacto del cambio climático mediante la educación de las comunidades.

Pronósticos alertan que sitios como Las Salinas Brito, en Ciénaga de Zapata, con unos 300 kilómetros cuadrados de gran biodiversidad, pudieran desaparecer en unos 20 años por el aumento del nivel del mar.

En ese corredor a donde emigran diversas especies en el invierno a consecuencia de las oleadas frías del norte, se constata un aumento de las temperaturas y la migración temprana de las aves.

El mangle es la primera línea de defensa contra el aumento del nivel del mar y enfatizan en la educación de la población para proteger las dunas y los dientes de perro.