Un prototipo de urinario que lava y seca el pene en cuestión de segundos tras su uso, ha sido presentado por un equipo de inventores españoles.

El sistema está dotado de sensores que se activan cuando el usuario ha terminado de orinar y ponen en marcha una cortina de agua enjabonada cuya temperatura varía en verano y en invierno, que en solo tres segundos limpia el pene.

Cuando ha terminado de salir el agua, otro sensor activa el sistema de secado que también dura solo tres segundos y que funciona como un secador de manos.

Los inventores del aparato, que ya están en tratos con una empresa fabricante, aseguran que su equipo es más económico por los materiales que emplea y que se adapta  al tamaño del usuario.