La Habana, Cuba. – Todo el personal que participa en el proceso de donación y trasplante de órganos es altamente calificado, con entrenamiento elevado y entrega total a ese tipo de actividad.

Así manifiesta el doctor Ricardo Pereda, quien menciona en ese grupo a  profesionales, técnicos y enfermeros, por cuyas manos pasa un complejo accionar hasta colocar en el paciente necesitado el órgano que le permitirá sobrevivir.

El funcionario del Departamento de Trasplante del Ministerio de Salud Pública destaca dentro de ese recurso humano al personal de enfermería, el más importante que puede haber en un hospital, por su decisiva entrega en el cuidado al lado del paciente trasplantado.

Añade que los enfermeros poseen el conocimiento no solo de la tecnología que se aplica en tales casos, sino también de todos los procederes que hay que acometer en ese tipo de paciente, incluida su vigilancia constante.