Perucho Figueredo fue el autor de La Bayamesa, himno patriótico cubano, que devino Himno nacional

La limpia ejecutoria revolucionaria de Perucho Figueredo, de cuyo natalicio se celebran mañana doscientos años, fue puesta en relieve en la más reciente edición de la Mesa Redonda.

El presidente de la Academia de Historia de Cuba, Eduardo Torres Cuevas, señaló que hombres así son excepcionales y constituyen un ejemplo de hasta dónde puede llegar el sentimiento de un patriota que sabe que morir por la Patria es vivir.

Fue el autor del himno nacional porque ese era el resultado de un pensamiento político que quería cambiar la Cuba colonial por un pueblo libre, gestor de una Cuba nueva, subrayó el también director de la Biblioteca Nacional.

El historiador de Bayamo, Ludín Fonseca, explicó cómo se logró precisar la fecha de nacimiento de Perucho Figueredo, el 18 de febrero de 1818, a partir de su expediente como alumno de la Universidad de La Habana.

Una pieza para la libertad

Perucho Figueredo fue el autor de La Bayamesa, himno patriótico cubano, que devino Himno nacional porque atrapó el sentimiento y el pensamiento de los revolucionarios, afirmó en la Mesa Redonda, el director del Museo Nacional de la Música, Jesús Gómez Cairo.

El musicólogo explicó la evolución histórica de esa obra, cuyo primer orquestador fue el también bayamés Manuel Muñoz y que fue publicada por Martí en el periódico Patria, años después de que lo hiciera El Cubano Libre.

Es una pieza que solo pudo haber sido hecha por un hombre de profundo patriotismo, afirmó Gómez Cairo, autor de la Breve historia del Himno Nacional que está disponible en las librerías.

La directora de la Casa de la Nacionalidad Cubana en Bayamo, Damiana Pérez, recordó en la Mesa Redonda los últimos días de Perucho Figueredo  y su indoblegable firmeza revolucionaria incluso ante el pelotón de fusilamiento.