El cultivo de algunos tipos de coles es uno de los más antiguos en la historia de las hortalizas.Existen muchísimas variedades y se clasifican según el tipo de hojas, el color, la forma y el peso del repollo.

Una especie es la llamada col de Bruselas, que presenta numerosos frutos pequeños que crecen en el tallo de la planta.

Los beneficios principales de la col no están dados básicamente por su aporte en nutrientes, en especial minerales y vitaminas, sino por la presencia de sustancias fitoactivas protectoras del organismo y por su bajo contenido energético, con la presencia de fibra dietética.

La col aporta al organismo vitamina C, ácido fólico y calcio. Con esa hortaliza se elaboran innumerables platos de cocina y podemos consumirla tanto cruda como cocinada.

Para saborear

Con la col podemos elaborar un sinfín de recetas. Esta que le ofrecemos ahora resulta muy apetitosa.

Emplee una libra de  picadillo de pescado y 2 onzas de picadillo de carne de cerdo. Mezcle bien ambos productos y añádale una cebolla bien picadita, media taza de yogurt natural, 2 cucharadas de vino seco y sal y pimienta al gusto. Deje la preparación en ese adobo por lo menos una hora.

Coja una col mediana y sáqueles las hojas más grandes. Páselas 2 minutos por agua caliente y déjelas refrescar. Coloque en cada hoja 2 cucharadas de la mezcla de picadillo, envuélvalas y acomódelas en una cazuela. Agréguele aceite y puré de tomate. Tape el recipiente y cocine por unos 20 minutos a fuego lento.