Esta semana insistimos en las ventajas que nos aporta el hacer conservas en la casa. La principal es la de tener vegetales disponibles todo el año, con pocos esfuerzos y recursos.

En estos momentos hay disponibilidad de pepinos en el mercado. Aproveche y confeccione pepinos encurtidos. La proporción de los ingredientes dependerá de la cantidad que desee elaborar.

Escójalos tiernos y de consistencia firme. Lávalos y colóquelos en un pomo de cristal, enteros, cortados en ruedas o en lascas largas. Llene el recipiente con agua y vinagre a partes iguales.

Por cada taza de esta mezcla añádale una cucharada de sal. Únalo todo en una cazuela y hierva por dos minutos. Eche esa preparación en un pomo de cristal previamente esterilizado y agréguele una hojita de laurel y clavo de olor. Póngalo al baño de María unos veinte minutos. Déjelos reposar unas dos semanas.

Provechosas elaboraciones 

En el minuto anterior hablábamos de lo oportuno que es hacer conservas en la casa. Ese buen hábito nos facilita realizar una receta determinada cuando el producto no está en estación, como es el caso de la zanahoria, col, remolacha y otros tantos vegetales.

Una conserva que resulta muy sabrosa y que por lo general gusta a todos, es la de encurtido agridulce molido, que puede acompañarse con pescado, embutido o comerse con galleticas o pan.

Utilice dos tazas de pepinos crudos y molidos con la cáscara. Escúrralos para que suelten su jugo. Agréguele una cucharada de cebolla cruda triturada, una cucharadita de sal, media taza de azúcar e igual cantidad de vinagre y, por último, una cucharadita de especias surtidas, como clavo de olor, canela en rama, pimienta u otras de su preferencia, que le aportarán un delicioso aroma y sabor a su encurtido agridulce.