Estudiosos de la historia citadina afirman que San Ignacio es el resultado de la unión de las calles conocidas como Miranda y la Ciénaga, que luego se unieron como paso previo al levantamiento de las Murallas.

En la temporada de lluvia, el agua se acumulaba en la zona e impedía el paso de los transeúntes, situación que además afectaba la salud de estos.

Cuando comenzó el tránsito por esa vía, se le conoció con el nombre de calle de la Ciénaga por el accidente geográfico denominado así, que estaba en las inmediaciones de la actual Iglesia de la Catedral.

¿Cómo surgieron la calle y la Plaza de San Ignacio?

Vale destacar que cuando se empezó a desecar la Ciénaga, al inicio de la calle que luego se conoció como San Ignacio, en La Habana Vieja, para aprovechar el terreno se descubrió que en la esquina, donde está el llamado Callejón del Chorro, brotaba un manantial.

Los vecinos de entonces eran personas muy humildes y vivían en casas de madera, que también alquilaban a los viajeros que venían en las embarcaciones de la flota.

Entonces, se puso al lugar el nombre  de la iglesia cercana: San Ignacio de Loyola. Allá por 1748 se ordenó construir el espacio que desde esa época se conoció como la Plazuela de San Ignacio.

Con la llegada del siglo Veinte, nació la etapa republicana y muchas calles cambiaron su nombre, lo que no sucedió con la de San Ignacio, que aún lo mantiene.

Visión de la calle San Ignacio

En los albores de la creación de La Habana, sus calles no estaban pavimentadas y, con el paso del tiempo, San Ignacio y otras de mucho tránsito de vehículos y personas se empedraron, para facilitar el movimiento en esas vías.

La historia recoge que antaño en la calle de San Ignacio no solo había viviendas, sino también comercios y un ejemplo de ello está dado en los anuncios de las publicaciones, que mostraban la presencia de establecimientos para la venta de ropa femenina, ferreterías, panaderías y otros servicios.

También hubo tiendas de locería y cristalería, refrigeración, una imprenta y la sede de los periódicos La Discusión y La Política Cómica.

La calle San Ignacio da una visión del pasado de La Habana y un fresco de distintos momentos a lo largo de casi cinco siglos.