El 23 de octubre de 1922 marcó un hito en la historia musical cubana, con el nacimiento de la habanera Iris Zenaida Burguet Díaz, conocida en el mundo del arte como Iris Burguet.

Al cumplir 15 años, debutó en el teatro capitalino Auditorium como concertista vocal, con la Orquesta Sinfónica Nacional, dirigida por Gonzalo Roig. También de la mano del Maestro, Iris actuó en las emisoras del Circuito CMQ, la RHC Cadena Azul y la C.O.C.O.

La prensa de la época recogió sus triunfos en las sociedades culturales de entonces, acompañada al piano por el compositor guanabacoense Ernesto Lecuona.

Iris Burguet declaró que esos años de su carrera artística solo se comparan con una imaginaria larga gira por Cuba y el exterior, que acabaría al ocurrir su deceso, en septiembre de 1987.

Amplia trayectoria artística

Al finalizar la tercera década del siglo XX, la soprano Iris Burguet estudió varios idiomas, que le sirvieron como herramientas indispensables para interpretar la música de concierto en la lengua original e incorporarla a su amplio repertorio.

En esa época también se graduó en el Seminario de Arte Dramático del Teatro Universitario y cursó Didáctica Musical e Historias del Cine y la Música.

En 1943, fue electa Reina de la Radio en el Primer Concurso Nacional del periódico “Mañana”, por su interpretación de la obra “Rayo de Sol”, que hizo para ella el Maestro Rodrigo Prats, y por 7 años consecutivos la crítica radial e impresa la reconoció como la cantante más distinguida del país.

El 10 de mayo de 1945 se presentó en la CBS Radio en Estados Unidos, y acumuló un amplio currículo.

Laureada intérprete

En el año 1949, la soprano habanera Iris Burguet actuó en México y Estados Unidos. Dos años después, representó a Cuba en la Olimpiada Internacional de Música, celebrada en Austria, con un rotundo éxito, que la llevó a su primera gira por el Viejo Continente.

Debido a su gran actuación durante el año 58 en Alemania, obtuvo una beca con magníficos resultados en ese país, por lo que el Presidente de la República, le entregó su título de graduada.

A partir del año 61, laboró como docente en el conservatorio habanero Amadeo Roldán, donde creó una Metodología para la Enseñanza Musical.

Es de los fundadores de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, UNEAC, que le otorgó la Distinción por la Cultura Nacional, dada su trayectoria artística de varias décadas.