La Habanaa, Cuba.- Pregunta un oyente por qué la palabra benévolo se escribe primero con B y luego con V, a pesar de que –según su opinión- debería de ser siempre B. Pero la ortografía no es caprichosa ni arbitraria, sino resultado de la etimología y la evolución de los vocablos. La palabra benévolo se deriva de los términos latinos bene (que significa bien) y volo (que significa querer).

Con el adjetivo benévolo calificamos al individuo que tiene buena voluntad, al que se conduce con buenos deseos y afectos; por cierto, voluntad, derivado también del verbo latino volo, se escribe con V. De la misma familia son las palabras benevolencia, benevolente, benévolamente, y en ellas hallamos la misma escritura, con B primero y con V después.

Volvamos siempre a los orígenes

Otra palabra en que la V sucede a la B es herbívoro, condición de los animales que se alimentan de hierba, debido a que los términos formantes del compuesto así lo determinan: hierba y voro (este último, verbo latino que significa comer, devorar). Ese mismo elemento aparece en los vocablos carnívoro (que come carne), insectívoro (que se alimenta de insectos), omnívoro (que come de todo)…

En esta última palabra hallamos además el adjetivo latino omnis, que significa todo, y que también encontramos en los vocablos OMNIPOTENTE (que todo lo puede), omnipresente (que está en todas partes), omnisciente u omnisapiente (que todo lo sabe), omnímodo (que lo abarca todo)….