La Habana, Cuba.- Este primero de enero celebramos el aniversario 58  del triunfo de la Revolución, esa que conquistó el pueblo de Cuba, después del derrocamiento del régimen dictatorial de Fulgencio Batista.

El 31 de diciembre del año 1958, el Comandante en Jefe Fidel Castro dio instrucciones a los coordinadores provinciales y municipales del 26 de Julio, y señaló que los dirigentes de esa organización en cada localidad debían asumir provisionalmente el gobierno de cada municipio.

El primer día de enero del 59, el líder de la Revolución dio a conocer un boletín especial por Radio Rebelde desde las puertas de Santiago de Cuba: Esta larga y difícil lucha no tendrá otro final que el triunfo de la Revolución.

Desde las puertas de Santiago de Cuba

Después  de siete años de lucha, la victoria democrática del pueblo tiene que ser absoluta, para que nunca más se vuelva a producir en nuestra Patria un 10 de marzo, expresó el Comandante en Jefe Fidel Castro desde el batey del central América, poco antes de llegar a Santiago de Cuba.

Cuando el líder de la Revolución arribó a esa ciudad, el primer día de enero del año 59, habló  al pueblo desde el balcón del Ayuntamiento, junto al parque Céspedes y dijo: “Santiagueros, compatriotas de toda Cuba: al fin hemos llegado a Santiago. Duro y largo ha sido el camino, pero hemos llegado” y añadió: “La  Revolución empieza ahora, la Revolución no será una tarea fácil, la Revolución será una empresa dura y llena de peligros, sobre todo, en esta etapa inicial”.

Un motivo de orgullo

En el primer discurso dirigido al pueblo de Cuba, el martes primero de enero de 1959, el Comandante en Jefe Fidel Castro dijo: “Santiago de Cuba se comportó ejemplarmente bien, y creo que será un motivo de orgullo para el pueblo, para los revolucionarios y para los militares de la Plaza de Santiago de Cuba”.

En otro momento significó: “Aquí estamos,  sencillamente, a  las órdenes del pueblo. Lo legal en este momento es el mandato del pueblo (…)  La paz que  nuestra patria necesita se ha logrado. Santiago de Cuba ha pasado a la libertad sin que hubiera que derramar  sangre. Por eso es que hay tanta alegría”.