La Habana, Cuba. -La Associated Press (AP) dio a conocer, hace unos días, que indocumentados son contratados para trabajos domésticos en propiedades millonarias de Donald Trump.

The New York Times refirió que ahora se trata de dos mujeres latinoamericanas que prestan servicios en uno de sus campos de golf.

Una de ellas, Victoria Morales, guatemalteca, y Sandra Díaz son responsables de la limpieza del lujoso recinto. Dicha instalación se encuentra en el municipio de Bedminster, en Nueva Jersey.

El Times además reporta que allí los supervisores tenían conocimiento de que otros empleados tampoco poseían documentación legal.

Morales dijo que el supervisor le facilitó un carné de Seguro Social y tarjeta de residencia permanente falsos.

Su abogado, Aníbal Romero, en un comunicado señala que el supervisor les profería insultos raciales y las amenazaba con deportarlas.

Intimidaciones y maltratos

Victoria Morales dijo a The New York Times estar ofendida por los comentarios de Trump sobre los inmigrantes ilegales a quienes llamó delincuentes violentos.

Ella denunció que el supervisor envalentonado por expresiones del presidente maltrató verbalmente a los empleados llamándolos estupidos inmigrantes ilegales.

Dijo al Times la eventualidad de ser despedida y deportada, pero tenía que alzar su voz, y añadió que está solicitando asilo y la posibilidad de presentar una demanda por maltrato. Su abogado, Aníbal Romero, pidió investigar el asunto.

Señaló que eso fue diseñado para intimidarlas, causàndoles temor por su seguridad y la de sus familias.

Trump moviliza unos 15 mil soldados en la frontera mexicana, y a la vez contrata a indocumentados como siervos en sus lujosas propiedades. Hecho que recuerda episodios vividos por caravanas de inmigrantes procedentes de países centroamericanos.