Numerosos comentarios ha suscitado el Proyecto de Constitución que es sometido a debate, en lo concerniente al capítulo III del título IV sobre los derechos sociales, económicos y culturales.

Particularmente abundan los criterios acerca del artículo 68, que define al matrimonio como la unión voluntariamente concertada entre dos personas con aptitud legal para ello, a fin de hacer vida en común.

ARTÍCULO 68. El matrimonio es la unión voluntariamente concerta­da entre dos personas con aptitud legal para ello, a fin de hacer vida en común. Descansa en la igualdad absoluta de derechos y deberes de los cónyuges, los que están obliga­dos al mantenimiento del hogar y a la formación integral de los hijos mediante el esfuerzo común, de modo que este resulte compatible con el desarrollo de sus actividades sociales.

La ley regula la formalización, reco­nocimiento, disolución del matri­monio y los derechos y obligaciones que de dichos actos se derivan.

La mayoría de los villaclareños se inclina por aceptar lo que desde hace años han decidido otros gobiernos del mundo, y en ese sentido, el maestro jubilado, Antonio Flori, comentó cómo su prima fue discriminada porque su orientación sexual no se correspondía con la tradición.

Era una buena persona, dijo, y sufrió por ser diferente; de ahí su apoyo al reconocimiento del derecho al matrimonio, con respeto a la identidad de género, que se propone en el Proyecto.

En defensa del amor

Para el estudiante universitario Andy Rodríguez, la propuesta del Proyecto de Constitución que define al matrimonio como la unión voluntariamente concertada entre dos personas con aptitud legal para ello, hará más inclusivo el proyecto social cubano y ratificará a Cuba entre las naciones a la vanguardia de los derechos humanos.

El joven expresó su acuerdo con el artículo 68, porque el amor no tiene sexo, como manifestó el diputado Miguel Barnet ante la Asamblea Nacional.

Andy alegó que son personas que merecen respeto sobre su decisión de compartir la vida con quien elijan y aplaudió los pronunciamientos del Estado cubano sobre el deber de protegerlas.

El universitario villaclareño cree que el artículo tendrá una buena acogida porque se aviene a los nuevos tiempos y formas de pensar, y porque se trata del bienestar de dos personas unidas por el amor.

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