Managua, Nicaragua. – El legado de Miguel D’Escoto seguirá vivo en sus ideas, afirmó el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, al asistir este viernes a las honras fúnebres de quien fuera conocido como el canciller de la dignidad nacional.

Como máximo referente político del sandinismo y de la teología de la liberación, D’Escoto falleció este jueves a los 84 años luego de una larga enfermedad, aunque de manera inesperada.

Al repasar su trayectoria revolucionaria, Ortega manifestó que D’Escoto siempre estuvo sembrando la esperanza en su país, primero como sacerdote, cuando el terremoto de 1972 sacudió Managua, y luego como diplomático cuando se erigió como defensor de la paz.

Por su parte la vicepresidenta de Nicaragua, Rosario Murillo, llamó al pueblo nicaragüense a mantener vivo el legado y ejemplo del exministro con la misma alegría y entusiasmo que el desplegó.