Granma se coronó campeón por primera vez. Foto tomada de Granma

Bayamo, Granma.- Pudo más la fe, la garra y el empuje emocional de la grada; Granma 40 años después de su debut en Series Beisboleras logró el feliz y definitivo descorche emocional, al inclinar la rodilla de Ciego de Ávila en el Mártires de Barbados 3 por 2.

Intentaron ponerse a resguardo los avileños fabricando dos en el cuarto episodio por remolques de Osvaldo Vázquez y Rubén Valdés, sin embargo los orientales descontaron aprovechando el descontrol de Erlys Casanova y el relevista José Ángel García; Carlos Benítez la fletó con base por bolas.

Granma puso música de tambor en el séptimo; empató gracias a fly de sacrificio de Yoelkis Céspedes frente al perdedor José Ángel García; y en el octavo otro elevado de sacrificio de Guillermo Áviles ante Dachel Duquesne trajó la decisiva.

Entonces se encomendaron a la armadura del brazo del triunfador Miguel Lahera, quien sacó los outs que sellaron la gloria beisbolera oriental.

Un triunfo del pueblo y para el pueblo

Es una enorme satisfacción ser campeón nacional de béisbol, un logro dedicado al pueblo, a los entrenadores y a todos los que siempre nos apoyaron dijo Carlos Martí, director del equipo de Granma.

Yunior Paumier, refuerzo de los Alazanes, afirmó la inmensa alegría que le representó ganar el título en una selección que lo recibió como uno más de una familia, que empujó parejo para lograr ese gran sueño.

Lázaro Blanco, principal lanzador de los granmenses aseveró que siempre confiaron en la victoria, pues además de conocer de su calidad, respetaron las virtudes de sus rivales, que nunca se dieron por derrotados por difícil que fuese la situación.

Noelvis Entenza, otro de los lanzadores que se lució en la gran final, dijo, que fue un honor jugar con Granma, equipo que nunca se rindió y demostró estar listo para lograr nuevas alegrías.