Foto/ La Jiribilla

A tono con el ambiente cultural que aporta la Bienal de La Habana, la galería del Museo del Ron Havana Club reabrió para acoger la exposición personal del artista Ernesto Rancaño titulada El eterno retorno.

En ella combina obras realizadas desde 2015 -en su mayoría exhibidas en Cuba por primera vez- y otras más recientes, cuya línea conceptual es la del regreso, la memoria, la añoranza, precisa la curadora Naylén Tocabens.

A partir de un texto de Nietzsche sobre cómo todas las cosas retornan eternamente, y nosotros mismos con ellas, y unas sandalias cuyas suelas son bloques encima de una caja de luz, el espectador recorre la muestra y vuelve sobre sí mismo, al comienzo.

En El eterno retorno, Rancaño utiliza elementos como espejos flexibles, rayos láser, proyecciones, objetos intervenidos e instalaciones,  para proponer un camino que recrea una historia de vida.