Díaz-Canel: Cuba espera que seamos como ellos. Foto: Trabajadores

Al asumir el mandato del pueblo como presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel dedicó su primer pensamiento a la generación histórica que con humildad y consagración acompaña esta hora de apremiantes desafíos.

Díaz-Canel en su primer discurso como Presidente de CUba

Cuba espera que seamos como ellos, capaces de librar victoriosamente todos los combates que nos esperan, dijo al referirse al General de Ejército Raúl Castro, José Ramón Machado Ventura, los Comandantes de la Revolución Ramiro Valdés y Guillermo García y otros héroes, diputados de esta legislatura.

Subrayó que más de medio siglo de calumnias y convites a la ruptura generacional y al desaliento frente a las dificultades no han podido derribar las columnas  del templo de nuestra fe.

Elección que emerge desde el pueblo

El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, expresó que con la constitución de la IX Legislatura del Parlamento culmina el proceso electoral revolucionario, que ha protagonizado el pueblo cubano, reafirmando su carácter democrático y al mismo tiempo conscientes de su elevada significación histórica.

Refirió que el pueblo, ejerciendo su derecho ciudadano, propuso, nominó, y eligió a sus representantes en las diferentes instancias de gobierno atendiendo a su identificación con ellos, al mérito y la capacidad, sin politiquería ni fraude, corrupción o demagogia.

Los genuinos representantes del pueblo cubano recibieron de pie y con aplausos al nuevo Presidente de la República de Cuba

Miguel Díaz-Canel dijo que los ciudadanos han distinguido a personas humildes, trabajadoras y modestas como sus genuinos representantes.

Se trata de una elección que emerge desde el pueblo, el que a la vez controlará su gestión, participando así en la toma de decisiones y en la implementación de las políticas aprobadas, afirmó el presidente cubano.

Compromiso con el pueblo y con el futuro

El proceso de elecciones que concluye hoy ha devenido contundente victoria de la unidad del pueblo y expresión de compromiso en la defensa de la obra revolucionaria, aseguró el presidente cubano, Miguel Díaz Canel.

Destacó que a esa confianza que el pueblo les entrega con su voto hay un solo modo de corresponder: actuando, creando y trabajando sin descanso por responder a sus demandas y necesidades, en vínculo permanente y estrecho con nuestra gente humilde, generosa y noble.

El presidente cubano dijo que lo más importante no es cuanto nos parecemos al país que somos, lo que no podemos olvidar ni un segundo, refirió, es el compromiso que adquirimos con el pueblo y con el futuro.

Díaz Canel aseveró que los diputados, la dirección de la Asamblea, los miembros de los Consejos de Estado y de Ministros, tienen su primera razón de ser en la vinculación sistemática con la población.

Unidad, la más valiosa y sagrada fuerza

El mandato dado por el pueblo en esta Legislatura es el de dar continuidad a la Revolución, en un momento histórico marcado por lo que logremos avanzar en la actualización del modelo económico y social, afirmó el recién electo presidente, Miguel Díaz-Canel.

Significó que asume la responsabilidad con la convicción de que los revolucionarios seremos fieles al legado de Fidel, y al ejemplo, valor y enseñanzas de Raúl, líder actual del proceso revolucionario.

Díaz-Canel señaló que ellos, unidos por la sangre, ideales y lucha, muestran en su más alto grado el significado de la palabra Hermano, y enfatizó que la unidad es la más valiosa y sagrada fuerza del país.

Está claro que solo el Partido, fuerza dirigente superior de la sociedad y el Estado, garantiza la unidad de la nación y es el digno heredero de la confianza depositada por el pueblo en sus líderes, destacó en la sesión del Parlamento.


Raúl, el mejor discípulo de Fidel

El recién electo presidente cubano, Miguel Díaz Canel, subrayó que Raúl, quien ha preparado, conducido y liderado este proceso de continuidad generacional, con firmeza, sin apego a cargos y responsabilidades, y con elevado sentido del deber y del momento histórico, se mantiene por legitimidad y mérito propio, al frente de la vanguardia política.

Díaz Canel expresó que Raúl, como cariñosamente le llama nuestro pueblo, es el mejor discípulo de Fidel, pero también ha aportado innumerables valores a la ética revolucionaria, la labor partidista y al perfeccionamiento del Gobierno.

La obra emprendida bajo su liderazgo es colosal –sentenció- así como su legado de resistencia ante amenazas y agresiones.

El Raúl que conocemos, admiramos y queremos

El recién electo presidente cubano, Miguel Díaz Canel, resaltó que el General de Ejército Raúl Castro asumió la dirección de la nación en una difícil coyuntura, y dirigió sin descanso, consagrado, con ímpetu, entrega y devoción.

Sostuvo que en su dimensión de estadista encabezó profundos e imprescindibles cambios estructurales y conceptuales, y más adelante manifestó: con paciencia, inteligencia y decisiones firmes, logró la liberación de Los Cinco Héroes.

Díaz Canel subrayó que el General de Ejército signó una amplia y dinámica actividad de las relaciones internacionales, y enfatizó: ese es el Raúl que conocemos, admiramos y queremos, el Raúl estudiante y rebelde que participó en la primera Marcha de las Antorchas.

Recordó además su trayectoria de combatiente, cuando desembarcó en el Granma, emprendió la lucha en la Sierra Maestra, y por mérito propio fue ascendido a Comandante.

Cuba jamás hará concesiones

Conocido el sentir popular, la Asamblea Nacional reafirma que el General de Ejército Raúl Castro, como primer secretario del Partido, encabezará las decisiones de mayor trascendencia para el presente y el futuro de la nación, afirmó Miguel Díaz-Canel.

El presidente de los Consejos de Estado y de Ministros ratificó que la política exterior de Cuba se mantendrá inalterable y nadie logrará debilitar a la Revolución, ni doblegar a su pueblo.

Cuba no hace concesiones contra su soberanía e independencia, ni negociará principios. Jamás cederemos ante presiones y amenazas, y los cambios necesarios los seguirá decidiendo soberanamente el pueblo, subrayó Díaz-Canel.

Reclamó el apoyo de los que desempeñan responsabilidades de dirección a diversos niveles, y especialmente el del pueblo, sin el cual -dijo- es imposible avanzar en medio de desafíos que nunca serán pocos en un país empeñado en hacer Revolución.

Compromiso de trabajo y exigencia

Tendremos que ejercer una dirección cada vez más colectiva en vínculo con la población, facilitando su participación en tareas revolucionarias y en la toma de decisiones, subrayó hoy el presidente Miguel Díaz Canel.

Vengo a crear el compromiso de trabajar y exigir en cumplimiento del programa trazado en los lineamientos de la política del Partido y la Revolución a corto, mediano y largo plazos, añadió en su discurso en el Parlamento.

Aquí no hay espacio para una transición que desconozca el legado de tantos años de lucha, sino sólo continuidad de la obra, unidas las generaciones nacidas y educadas en la Revolución y la generación fundadora, reiteró Díaz Canel.

Unidad y firmeza ideológica

El presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel, reafirmó que las prioridades están definidas en los documentos aprobados en el séptimo Congreso del Partido y respaldados por el Parlamento tras largo proceso de consulta nacional.

En ellos se reconocen como fundamentales -recordó- la labor político-ideológica, la lucha por la paz, la unidad y firmeza ideológica vinculada al desarrollo de la economía nacional, asegurando la participación consciente y comprometida en la actualización del modelo económico y social del país.

Nos toca perfeccionar su implementación, corregir errores, sacar experiencias y evitar improvisaciones e incumplimientos, sostuvo Díaz-Canel y ratificó que la Revolución sigue y seguirá viva.

El presidente cubano llamó a defender los valores en que creemos con modestia, desinterés, solidaridad y heroísmo, luchando con audacia, inteligencia y realismo.

La Revolución sigue de verde olivo

El presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel, expresó que la Revolución sigue de verde olivo dispuesta a todos los combates, el primero para vencer nuestras propias indisciplinas y errores.

Convocó a avanzar sin prisa pero sin pausa -como advirtió Raúl- hacia la prosperidad que nos debemos y tenemos que conquistar más temprano que tarde, y en un día tan simbólico llamó a pensar en Fidel y su imprescindible legado.

Que cada fibra de nuestra estirpe revolucionaria vibre cuando proclamemos: Yo Soy Fidel, y juremos defender esta Revolución socialista que la generación histórica ganó de pie en Girón y nos entrega invita ahora, confiada en que sabremos honrarla, enfatizó Díaz Canel.

A propuesta suya se acordó que la composición del Consejo de Ministros se aprobara en la próxima sesión ordinaria del Parlamento, en julio.